El 90% de la población mundial, en algún momento de su vida, padecerá algún tipo de patología bucodental. La gravedad de estas puede ser muy diversa y puede ir desde una caries al cáncer oral.

Las afecciones bucodentales más comunes son:

• Caries
• Bruxismo
• Enfermedades periodontales
• Mal aliento (halitosis)

La mayoría de estas afecciones pueden evitarse mediante planes odontológicos preventivos y unos hábitos de higiene dental adecuados.

• Es fundamental cepillarse los dientes de 3 a 4 veces al día, después de cada comida, durante unos 3 minutos (aproximadamente la duración de una canción). Puede hacerse con un cepillo eléctrico o manual. Procuraremos pasar por todas las caras de todos los dientes llegando hasta las encías, y finalmente, la lengua.
• Es importante usar hilo dental y/o cepillos interproximales, para limpiar entre diente y diente. También podríamos usar irrigadores, que funcionan con agua a presión. Con ello evitaremos el cúmulo de comida que podría acabar ocasionando caries que a veces son difíciles de detectar cuando son pequeñas.
• No hay que olvidarse del colutorio, para acabar de eliminar restos de comida que hayan quedado después de los dos pasos anteriores. Hacer gárgaras con el colutorio es un complemento del cepillado, no un sustituto de éste.
• Es aconsejable hacer una higiene dental una vez al año en la clínica para poder sacar el cálculo dental que se acumula bajo la encía y que en casa no podemos retirar. Las visitas anuales a la consulta para realizar la higiene podemos detectar tratamientos en estado de inicio que serán más fáciles de solucionar y mucho más económicos que si nos esperamos a que nos haga daño.